DIRECTORA NACIONAL DE MOVILIDAD EN BICICLETA
- Profe en Bici

- 6 jul 2017
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Hoy por la mañana, mientras me preparaba para emprender un nuevo día en las escuelas, mientras como todos los días buscaba escuchar en la tele el pronóstico meteorológico para el resto del día, no sólo me encontré con otro día difícil para la bici, sino con uno de esos periodistas demagogos, formadores de la opinión que les conviene, anunciando en tono burlón, la creación del cargo de "Directora nacional de movilidad en bicicleta" y su correspondiente asignación a la arquitecta María Belén Cardasz. El tono mordaz y burlón del señor Adrián Ventura (extrañamente lo sobrenombran "profe") iba más allá del sueldo que ahora deberíamos pagarle a esta nueva funcionaria el resto de los argentinos; dejaba translucir cierto desprecio hacia la bicicleta, es decir, un pensamiento que atrasa unas cuántas décadas, si tenemos en cuenta el terreno que esta modalidad de transporte ha tenido y viene teniendo en otras latitudes del globo. Me pareció ver en su comentario esa sonrisa que te devuelve el automovilista que te encierra sabiendo que está haciendo lo que no corresponde, pero sabiéndose también portador de un poder que, al menos en ciudades como la mía, le da impunidad.
En un país con altos índices de corrupción, donde la plata se invierte en donde no se debe y se evitan los impuestos a los autos de alta gama, y en donde los diputados, senadores y jueces se aumentan el sueldo sin consultarle a nadie, la preocupación y la indignación por lo que pueda ganar esta funcionaria me da la sensación de que esconden otras motivaciones. Bienvenido para mí el cargo y bienvenida la funcionaria. Espero con todas mis ansias que haga su trabajo, y que en poco tiempo se vean sus frutos. Hay mucho por hacer.
Podríamos pensar que es un cargo superfluo. Sin embargo, si hay algo que quienes participamos activamente del colectivo ciclista de Buenos Aires hacemos, es denunciar infinitas irregularidades y aspectos a mejorar en la planificación urbana, y por lo tanto política, de la movilidad en bicicleta. Y si queremos imitar a las ciudades que han dado pasos significativos y eficientes para ordenar el tránsito, alguien que coordine esta dimensión es más que útil. Hay mucho por hacer.
Va quedando claro, por las discusiones tenidas con otros ciclistas urbanos en los últimos días, que los funcionarios son afectos a subirse a la bici para sacarse una foto, no así para circular por la ciudad. Pero igual que pasa en las escuelas, el reconocimiento a la tarea docente no solo llega por el sueldo, y no me refiero al de María Belén, sino a la inversión que se hace en infraestructura ciclista. No todo es infraestructura, y aunque no creo que debamos dejar de reclamarla, designar a una funcionaria específica para este tema es, de algún modo, dar prioridad y reconocimiento a la importancia que para este gobierno tiene la bicicleta. Bienvenido sea que la dirección sea nacional y no sólo para el distrito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o alguna otra ciudad importante del país. Hay mucho por hacer.
Por último, se me ocurre sugerirle a la nueva directora una serie de problemáticas que vemos quienes sí nos movemos en bici. Desde ya están abiertos los comentarios para ampliar y completar la lista:
- La ciclovías existentes están quedando chicas, escasas, desconectadas, concentradas.
- Faltan estaciones de bicicletas públicas.
- Muchas de las ciclovías están rotas.
- En general, están rotas porque autos, camiones y colectivos estacionan o se detienen encima de ellas. Y si no es encima, es al lado del separador.
- Los automovilistas no nos respetan ni en la prioridad de paso, ni en la distancia que deben guardar de nosotros.
- Las canaletas y alcantarillas en las bocacalles son muy peligrosas para los ciclistas.
- En algunos estacionamientos comerciales no se nos permite dejar nuestras bicis, y no se los sanciona.
- En los nuevos pasos bajonivel no sólo no se contempla la circulación de bicicletas, sino que además se nos prohíbe hacerlo.
- Se debería repensar el doble sentido de las ciclovías.
- Hay que revisar algunas normativas absurdas, como la máxima de 25 km/h para todas las bicicletas.
- Hay que trabajar y legislar en la colocación de ciclovías en avenidas.
- La seguridad en algunos sectores de la ciudad es lamentable. A la vez, habría que crear algún registro eficiente de bicicletas.
- Por medio de incentivos económicos, se debería propiciar el traslado en bicicleta desde y hacia los lugares de trabajo o de estudio.
- Las ciclovías deberían ir todas por la calzada.
- Sería conveniente repensar las normas de tránsito adecuadas para la circulación de bicicletas, dejando de lado el paradigma autocéntrico.
- De lo anterior se requiere que los automovilistas deban ser capacitados para convivir con los otros actores.
- Los ciclistas también deberían ser capacitados para respetar a los otros actores, sobre todo a los más débiles que él (peatones).
- Los agentes de tránsito deberían actuar con prioridad en la defensa del espacio para peatones y ciclistas.
- Las velocidades máximas de automóviles debería limitarse en las arterias con ciclovías.
- Para facilitar el acceso a la bicicleta propia, debería continuarse y replicarse el programa del Banco Ciudad de 50 cuotas sin interés.
- Favorecer la intermodalidad, tanto en subte como en colectivos.
- Realizar propaganda para que toda la población siga descubriendo los beneficios de las bicicletas.
- ...
En fin, lo digo por última vez: hay mucho, muchísimo por hacer.
Ojalá la funcionaria pueda darse una vuelta por acá o por alguna de las cuentas de Twitter de quienes día a día piden la atención de los servidores públicos.
¡Buena rodada!

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